Un año sin tí, lapso de tiempo que se pasó volando.
Ausencia la tuya tan irreparable, qué pesar.
Han sido difíciles estos meses, pero he pensado
en lo que tú, desde el cielo, nos quieres desear.
Allá con Dios, Fita, tú ya gozas de la Vida Eterna.
A un año de tu partida, yo sé que aún nos cuídas.
Ausencia la tuya tan irreparable, qué pena,
pero nos reuniremos contigo, luego de esta vida.
Un año sin tí, lapso de tiempo que se pasó volando.
20 de octubre de 2001, fecha de tu ida con Dios.
Hoy, los que te queremos, te seguimos recordando.
Gracias, mamá, por todo. Te extrañan tus hijos.
|