Solo bajan las defensas,
solo aflora la pena,
solo aprace el miedo,
cuando la muerte se acerca.
Pero mi lucha es constante,
por esta vida incierta,
y en la hora delirante,
busco siempre una puerta.
Y por dios que la hallaré,
porque aún vida me queda,
auque sea dando tumbos,
no me rendiré a la quimera.
Voy a replegar mis fuerzas,
todas, para llegar a la meta,
solo estoy a mitad de camino,
de eras nuevas y bellezas.
No me puedes enfermedad fea,
solo me acompañas un tiempo,
hasta que de ti me defienda,
hasta que te venza, te pueda.
Volveré a ser yo, como siempre,
de mi casa la reina,la primera,
de mis seres amados, princesa,
para seguir amándoles a su vera.
Seré de la mañana, sol y niebla,
de la tarde el horizonte, reserva.
de la noche, brisa, luna, estrella.
vida, claridad, señora, su dueña.
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