Ya lo comprobamos UN DÍA,
amado y caro mío,
sin mi presencia en tu vida
¡la ciudad luce vacía!
Sí adorado, sin el ruido de mis pasos,
de mis prisas y cuidados
¡la ciudad luce vacía!
Sin mi voz que te consuele, que te anime,
que te aliente, sin mis brazos de paloma,
sin mis besos de frambuesa,
mis reclamos y protestas,
¡La Ciudad luce vacía!
9 de marzo de 2020.
|