Aun me huelo a ti,
cuando desbocada espero,
encaramarme en el mástil,
que ayer dominó mi cuerpo.
Mis manos las hago tuyas,
para sentirlas muy lento,
como me rozas y acaricias,
con la yema de tus dedos.
Cierro mis ojos y vuelo,
se seca mi boca,
de tanto jadeo inquieto,
de no tenerte en mi,
de tanto buscarte dentro.
Expandida y ardiente
revivo tu recuerdo,
se abren mis poros,
creciendo mis pechos.
Estrujada en mis entrañas,
siento pasión, locura, deseo,
ansias, fantasía, recuerdo,
y te amo, te amo flotando,
dejándote apresado en mi,
e impregnada de ti muero.
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