Cuando yo te conocí un día
Parecías poetisa que iba a recitar,
¡que sorpresa me llevé al decirme quien eras
y te seguí tuteando, la poetisa era yo!.
Y que siendo quien eras, nuestra conversación siguió.
Lo bonito de la vida, es el saber estar,
Lo demostraste ese día, y con una gran sencillez
Demostraste lo que eras, mujer con muchos valores
Pues tu misión era llenar, soledad de los mayores.
Así lo vi yo ese día, tus horas las entregabas
Preparando la alegría, que son nuestros carnavales,
¡Una forma de ayudar, sin que nadie se moleste
Hay tantas formas de hacerlo si hace elegantemente.
Y tú lo supiste hacer, fuera una fiesta especial
Ponías tu corazón, y que resultara bien la fiesta
¡Y vaya si resulto, que te quedó muy perfecta,
y que a todos nos gustó, y por eso en mi poema
Lo quiero resaltar yo, en estos cuatro renglones,
Eres una gran señora, lo demostraste ese día,
¡No todas lo saben ser, aunque sean muy señoras
La mujer de un gran Alcalde, Rosa Francia por más señas!.
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